¿MEJOR SER UN BUEN RECUERDO- QUE UNA MALA COSTUMBRE?
Le haces el amor, te la coges, te la das ¿y qué sigue?
Sigue cada uno cambiarse de ropa, tomar una ducha porque aún hueles a
piel ajena... Si es motel cada uno por su lado, si es tu casa toca tender las
sábanas, si la quieres le preparas el desayuno, si aún no la quieres
sigue cogiendo eventualmente le tomarás cariño...
Si aún no sabes cómo le gusta el café, cómo le gustan los besos, sus zonas sensibles... si no sabes esos problemas que la acogen, sus miedos más profundos o sus sueños, en definitiva aún no te la coges lo suficiente...
Si se va de madrugada o en la mañana, no te confundas, no lo hace por protocolo o porque esté ocupada... simplemente no tiene ganas de quedarse
Si compartes cama con una mujer y no vuelve algo estás haciendo mal y no tiene nada que ver con el tamaño de tu miembro o cómo coges, sino quizás no la comprendes, no la escuchas, no la haces reír o no se siente segura contigo...
Es que así es, hasta las que se autodenominan putas tienen al menos una cama a la que siempre regresan, una casa donde pueden despertar con su desayuno favorito, un café, una sonrisa y la seguridad de que ahí siempre será bienvenida...
A las mujeres siempre hay que tratarlas con cariño, aunque digan que no le gustan esas cosas, aunque se las den de muy cabronas...
La cosa va así, te la coges como si la odiaras, pero despiertas como si la amarás pregúntale cómo le gusta el café y pídele que se quede, que hay mucho tráfico, que afuera está lloviendo o yo qué sé...
invéntate una excusa cualquiera, ofrece una de tus camisas como pijama, recuéstate a su lado, dale su café, mírala a los ojos y hazle preguntas hasta que te canses...
Te puedo asegurar que una vez que empiece no vas a hacer que se calle, porque siempre se la habían cogido y ya... ningún hombre se preocupó por la mañana...
Eventualmente tendrá que irse como todo lo bueno que llega a nuestra vida y se irá con los ojos brillando, con una sonrisa que no se la aguantará nadie, regresarás a tus hábitos, a tus quehaceres, a tu vida que ahora se siente diferente... Pero no pasará mucho tiempo
tu teléfono vibrará, y será ella en forma de mensaje, un mensaje que las cabronas no mandan; "Te extraño "... así a secas y no sabes cuánto le costó escribirlo...
Entonces tiendes tu cama, preparas la cafetera y sonríes porque es inevitable no quererla, aunque sea un poquito...
Carlos Cortés - Mujeres que son aves.
sigue cogiendo eventualmente le tomarás cariño...
Si aún no sabes cómo le gusta el café, cómo le gustan los besos, sus zonas sensibles... si no sabes esos problemas que la acogen, sus miedos más profundos o sus sueños, en definitiva aún no te la coges lo suficiente...
Si se va de madrugada o en la mañana, no te confundas, no lo hace por protocolo o porque esté ocupada... simplemente no tiene ganas de quedarse
Si compartes cama con una mujer y no vuelve algo estás haciendo mal y no tiene nada que ver con el tamaño de tu miembro o cómo coges, sino quizás no la comprendes, no la escuchas, no la haces reír o no se siente segura contigo...
Es que así es, hasta las que se autodenominan putas tienen al menos una cama a la que siempre regresan, una casa donde pueden despertar con su desayuno favorito, un café, una sonrisa y la seguridad de que ahí siempre será bienvenida...
A las mujeres siempre hay que tratarlas con cariño, aunque digan que no le gustan esas cosas, aunque se las den de muy cabronas...
La cosa va así, te la coges como si la odiaras, pero despiertas como si la amarás pregúntale cómo le gusta el café y pídele que se quede, que hay mucho tráfico, que afuera está lloviendo o yo qué sé...
invéntate una excusa cualquiera, ofrece una de tus camisas como pijama, recuéstate a su lado, dale su café, mírala a los ojos y hazle preguntas hasta que te canses...
Te puedo asegurar que una vez que empiece no vas a hacer que se calle, porque siempre se la habían cogido y ya... ningún hombre se preocupó por la mañana...
Eventualmente tendrá que irse como todo lo bueno que llega a nuestra vida y se irá con los ojos brillando, con una sonrisa que no se la aguantará nadie, regresarás a tus hábitos, a tus quehaceres, a tu vida que ahora se siente diferente... Pero no pasará mucho tiempo
tu teléfono vibrará, y será ella en forma de mensaje, un mensaje que las cabronas no mandan; "Te extraño "... así a secas y no sabes cuánto le costó escribirlo...
Entonces tiendes tu cama, preparas la cafetera y sonríes porque es inevitable no quererla, aunque sea un poquito...
Carlos Cortés - Mujeres que son aves.
-¿¿Qué piensa??, lo observó
mientras el trataba de ocultar
aquella hoja, o refundirla quizás en
los papeles, que se
confundiera con la prensa o los recibos por pagar; por
muy sencillo que sonara, no
lo era decirlo y menos a
la mujer, que aquella noche
ocupo ese lugar y calentó el
nido.
Minutos antes era imposible dejar de mirarla, allí
dormida y tener la
certeza que más temprano que tarde, tomaría vuelo, él
sabía que no le pertenecía,
como no
lo fue de nadie
y eso precisamente era lo que
le encantaba de
esta mujer, sus alas y
aquella libertad innata que lo retaba,
atarla a si
fuera a la pata
de su cama.
Se
dirigió a la cocina, y
trato de preparar aquel café, que no
era comparable al que ella preparaba.
-¿Cuál sería su secreto?- Claro que lo sabía, la miel de sus labios, que endulzaba con sus dulces palabras mojadas, que salían de su boca danzando en movimientos sensuales.
Temió
como nunca preguntar, cuando sería
el viaje, pero los dos sabían
que la historia estaba llegando a su
final. De acuerdo a los planes, ya lo habían logrado.
Aquel
desconcierto del que termina lo inundó, ¿Y la alegría? De la labor
realizada, el fresquito de la venganza, todo aquello
quedó en un segundo, tercero y cuarto plano. En
aquellos momentos no Logró
apartar aquel pensamiento de su
cabeza;
-< Eliana se quedaría o se iría, que pasaría cuando al día siguiente llegara aquel hombre que la daño tanto, solicitando su anhelado perdón>-.
-< Eliana se quedaría o se iría, que pasaría cuando al día siguiente llegara aquel hombre que la daño tanto, solicitando su anhelado perdón>-.
Cuando volvió...Solo encontró la cama vacía, un rosa blanca sobre las misma y una pequeña nota.
–! No fui capaz de
retenerla!!-, se auto-flageló, para
luego justificar, con su parte
racional, que esto era claro desde el principio, que el
amor que ella sentía por Marco
era superior a su
sed de venganza,
y la había logrado, tenerlo en sus pies, solicitando perdón y loco de amor, < tarde que temprano correrá a sus
brazos>, no estaba dispuesto a ver este episodio.
-!!Estúpido!!, no tenía que enamorarme-; algo
inevitable, tarde fue cuando comprendió: “Quiso
jugar con el amor, y él amor jugó con él".
Se coloco en la orilla de la cama, y las lágrimas brotaron sin parar.
- ¿Azúcar o Miel? , una tierna voz, retumbó cual dulce melodía en sus oídos.
El café de aquella mañana le supo especialmente dulce, aquel que solo es comparable con la miel que le da el amor.
Por un instante lo invadió la certeza , su alma no podría tener mejor refugio.
Solo pudo sujetarla entre sus brazos y tan cerca de su corazón como le fue posible, mientras las lágrimas de felicidad no paraban de brotar, hasta ser una cascada entre los dos.. fue el lugar más seguro, el nido, que estas almas atormentadas, encontraron por mucho tiempo.
El café de aquella mañana le supo especialmente dulce, aquel que solo es comparable con la miel que le da el amor.
MEJOR SER UN BUEN RECUERDO-
QUE UNA MALA COSTUMBRE